La iniciativa Suma Manuela del Movimiento Manuela Ramos y Economistas sin Fronteras, pretende compartir experiencias y saberes entre tejedoras de las zonas rurales de Puno, en Perú, y tejedoras de otras partes del mundo.
Manuela es un nombre muy común en Perú, de donde es originaria esta web, pero también lo es en América Latina. Una organización de mujeres eligió este nombre para representar a todas las mujeres que de forma anónima defienden sus derechos. Y la palabra Suma, en Aymara, una de las lenguas autóctonas de Puno, quiere decir “buena, linda, bonita”. De esta manera queda identificado este proceso, que entreteje el apoyo a las tejedoras de Puno, y a la vez narra las historias de miles de mujeres del campo, quienes a través de sus manos y saberes, mantienen a sus hogares y a ese espacio de encuentro que representa el trabajar con las manos.
Todo empezó en 1978 cuando en Perú un grupo de mujeres formó el Movimiento Manuela Ramos para buscar soluciones a los diferentes problemas a los que se enfrentan las mujeres. Uno de estos problemas era la falta de independencia económica que limita la capacidad de decidir de muchas mujeres. Así, en 1993 el Movimiento Manuela Ramos crea la Casa de la Mujer Artesana, como un intento de conseguir que las mujeres de las zonas rurales de Perú mejoraran sus ingresos a través de la elaboración y venta de diversos productos como: joyería, cestería, bordados, etc. centrándose a partir del año 2010 en productos tejidos a mano.
Desde entonces, han trabajado con distintas asociaciones de tejedoras, a través de la capacitación, búsqueda de mercados y difusión de sus historias, entre otras actividades.
Si quieres conocer más de esta iniciativa ingresa a: http://sumamanuela.ecosfron.org/